Hace ya algunos días, tantos que he estado por dejarlo pasar. Pero me resisto a no contar nada sobre los cinco jubilados que se vengaron de su broker, sorprendiéndole al salir de una cafetería, metiéndolo en el maletero de un coche y torturándolo durante cuatro días, hasta que consiguió avisar a la policía.
¿La culpa de la víctima? Haber invertido los ahorros de los otros cinco (2 millones de euros) en el sector inmobiliario de Florida. No se dan más detalles de la relación que había entre los cinco, o entre ellos y el broker.
Lo que me llama la atención es el aspecto de que los desafortunados inversores se tomen la justicia por su mano. No me extrañaría nada si alguien me hubiera dicho que era el argumento de una película de Alex de la Iglesia, de Pedro Almodóvar (película antigua; en una reciente no encajaría) o algún otro director español. Luego he recordado que, ya hace bastante, se estrenó la película Justino, el asesino de la tercera edad. Supongo que, como no llegué a verla, no me he acordado directamente de ella.
Los ancianos se enfrentan a 15 años de cárcel (lo mismo pueden coincidir con Madoff y hablar de sus cosas)
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