Adelanté a últimos del año pasado unas declaraciones extraoficiales sobre el cambio de rumbo de la política municipal, que entre otras cosas se vería reflejado, previsiblemente, en la actitud con respecto a la estupenda línea a favor de la movilidad ciclista que se estaba desarrollando. Hasta tal punto, que se llevó el Primer Premio de Sostenibilidad Local.
Y como guinda, como empujón que resultaría importantísimo en este sentido, y para aprovechar el desarrollo realizado, la noticia de que la Comunidad de Madrid entregaría bicicletas de uso público a varios municipios, entre los que se encontraba Pinto.
Una buena noticia sobre otra, ¿no?
Fin del sueño: una nota de prensa publicada por Aulaga dice:
Desde la moción de censura del pasado mes de diciembre, el nuevo gobierno tripartito ha paralizado todas las actuaciones iniciadas, siendo el caso más sangrante la no adjudicación del servicio de alquiler de bicicletas que ya se había sacado a concurso.
Así, el Ayuntamiento de Pinto había conseguido en el año 2008 una subvención de 200.000 euros del Consorcio de Transportes de la Comunidad de Madrid para instalar este servicio con 185 bicicletas de préstamo. Sin embargo, el nuevo gobierno municipal en vez de utilizar dicha subvención ha preferido devolverla, circunstancia que se agrava cuando observamos que en el presupuesto municipal aprobado para este año, 65 millones de euros, no se destina ni un euro a la promoción del uso de la bicicleta en Pinto.
No creo que lo haya entendido mal, pero dan ganas de leerlo otra vez. A un Ayuntamiento le dan dinero para llevar a cabo un proyecto, y lo rechaza. Sin más obligaciones, según entiendo, que la de dedicar el dinero al fin para el que se da.
Supongo que el gobierno municipal ha entendido que tal inversión sería dañina para el municipio, y por ello la rechaza, aunque le salga gratis.
A pesar de todo lo que hay en contra, los que ya son ciclistas van a seguir siéndolo. Y el próximo día 29 de mayo (último viernes de mes), a partir de 19 horas, se juntarán en el Parque del Egido, frente a la iglesia, para dar un paseo por Pinto.
Creo que en este caso la bicicrítica local no aportará tanta protección, al ser el tráfico más tranquilo. Espero que al menos aporte visibilidad ciclista y dé que pensar. A peatones, a conductores y a gobernantes.
Por cierto, publican en el número de mayo de la revista municipal, en una minúscula, que la Agenda 21 retomaría en este mes sus reuniones y calendario de trabajo. Habrá que ver cómo se digiere esto. O si no será un farol para contentar a los que supieron de la dejadez reinante.
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